Carretera 99

Bakersfield está llena de sorpresas. Conocida en el pasado por el aceite y la agricultura, esta ciudad del Valle Central se está transformando en el centro del arte, la cultura y los deportes, mientras que sigue ofreciendo una visión del pasado. Visita el Parque Histórico Estatal Colonel Allensworth, ubicado a 45 millas/72 kilómetros al norte. Esta colonia de principios de 1900, un intento de un grupo de afroamericanos de crear una sociedad utópica lejos de la influencia negativa del mundo exterior, que ofrece una mirada extraordinaria de un evento inusual en la historia de California.

Las atracciones más recientes de Bakersfield incluyen el Distrito de las Artes, repleto de galerías, lugar donde el Teatro Fox de 1930 alberga espectáculos que van desde música pop hasta ballet. No te pierdas el Buck Owens Crystal Palace, hogar del Sonido Bakersfield, un tipo de música country vibrante característico de la región. La mayor concentración de restaurantes vascos del país, entre ellos, el Noriega Hotel, nos recuerda la rica historia vasca de la región (inmigrantes procedentes de los Pirineos españoles y franceses que establecieron ranchos de ovejas en este lugar a fines de 1800). En primavera, las flores silvestres cubren la sierra de Tehachapi.

Pasa la noche en el Hotel Padre del centro, un lugar moderno y de lujo que se construyó en 1928.

A 72 kilómetros al noroeste de Bakerfield, el Parque Histórico Estatal Colonel Allensworth ofrece una visión destacable de uno de los episodios más particulares de la historia de California. En una zona apartada del sur del Valle de San Joaquín, se encuentra un asentamiento de principios de siglo XX fundado por Allensworth, que había sido un esclavo, y otros cuatro afroamericanos. Estos pioneros esperaban crear una comunidad agrícola en donde, ellos y otros afroamericanos, pudieran vivir sin ser discriminados. El asentamiento creció rápidamente y para 1914 ya tenía una población de más de 200 habitantes. Pero la escasez de agua y otros problemas terminaron por condenar al pueblo y, para 1970, ya nadie vivía allí. Ven a visitar este parque y podrás conocer un poco de la historia de este pueblo, mientras recorres la casa de Allensworth y otros edificios que aún subsisten.

Si estás buscando un bocadillo o una comida a lo largo de la Carretera 99, en el pequeño Traver (que tiene una población de poco más de 700 habitantes) encontrarás el antiguo Bravo Farms Traver, que ofrece de todo, desde degustar vinos hasta alimentar animales. Disfruta de la cocina tejano-mexicana en el restaurante Wild Jack's y, como postre perfecto en una calurosa tarde en el Valle Central, prueba una bola de helado de Rosa Brothers Ice Cream. Los niños pueden divertirse en una casa de siete pisos en un árbol (incluida en el Libro Guinness de los Récords), jugar al golf en miniatura y ver una variedad de animales, como, por ejemplo, llamas. Mientras tanto, la Vintage Cheese Company de Bravo Farms Traver tiene más que ver con los placeres de los adultos, gracias a las degustaciones de quesos artesanales y vinos de California.

Prueba una deliciosa muestra de la rica herencia mexicana del Valle Central en Los Toritos Taco Truck en Selma. Pide auténticos tacos, quesadillas o burritos, y acompaña tu comida con una cerveza helada.

Fresno ofrece una escapada sorprendentemente divertida. Cuenta con siete estadios y un par de campos deportivos para los turistas aficionadoa a los deportes, y el festival anual Woodward Shakespeare, en el lujoso Woodward Park, que es testimonio de la inclinación cultural de Fresno.

Sin embargo, aquí lo principal es la agricultura. Visita el gran mercado agrícola del viñedo los miércoles por la tarde y los sábados por la mañana. A principios de la primavera, recorre la Ruta de las flores, un trayecto de 100 km en automóvil o en bicicleta. En esta época, la ruta está rodeada de árboles frutales y nogales en plena floración. En el verano, la ruta se transforma en la Ruta de la Fruta del condado de Fresno, donde los puestos de fruta se desbordan con los productos de estación.

De regreso en la ciudad, explora un espacio subterráneo en Forestiere Underground Gardens, jardines cavados a mano por un inmigrante italiano que pensó que estar bajo tierra era una buena manera de mantenerse fresco y cómodo durante los veranos del Valle Central. Los niños adoran el Chaffee Zoo, particularmente, las focas, los leones marinos y las morsas que habitan el Sea Lion Cove. Los encuentros mensuales Art Hops son una manera fantástica de explorar el Mural District, una zona con una enorme cantidad de estudios de artistas y galerías de arte. Al oscurecer, se encienden las luces de restaurantes y clubes que hacen brillar el área de Tower District.

Pasa la noche en Merced, en la colonial Bear Creek Inn, que ha sido administrada por solo cinco familias desde 1882.

Reconocida por sus vinos tintos robustos, particularmente la antigua cepa Zinfandel, Lodi, ubicada 83 millas/133 kilómetros al este de San Francisco, también es líder en materia de ecología. Más de 10.117 hectáreas de viñedos están certificadas como sustentables, y este es el lugar de nacimiento de las Normas Lodi, el primer programa de vitivinicultura sustentable de California certificado por terceros. En los últimos años, ha surgido una variedad de salas de degustación, la mayor parte de las cuales se encuentran a una distancia de 15 minutos en auto desde el centro de la ciudad. Un excelente lugar para comenzar es Lodi Wine & Visitor Center, que ofrece una selección rotativa de vinos varietales provenientes de casi 80 vitivinicultores locales.

Si bien la variedad de vinos ha crecido, los vinos varietales generosos y concentrados New World siguen siendo el sello de la región, y más del 40% de los Zinfandel del estado se producen aquí. ZinFest es la fiesta anual de tres días de degustación que se celebra cada mes de mayo y ofrece la oportunidad de probar unos 250 vinos de los mejores productores de Lodi.