El lado oeste de Silicon Valley, donde la tierra se levanta para encontrarse con los pliegues arbolados de las Sierras de Santa Cruz, se ha convertido en un destino atractivo de la tierra del vino. La encantadora aldea de Saratoga es el centro de la región. Allí encontrará salas de degustación como Cinnabar, donde puede saborear pequeños platos y el galardonado Mourvedre en un patio a la sombra. Para un buen mimo, consulte el calendario y pase una tarde de entretenimiento en la histórica bodega Mountain Winery. El legendario Paul Masson, que emigró a San Francisco desde Borgoña, Francia, a fines de 1800, compró un viñedo en Saratoga donde desarrolló los mejores vinos espumantes de California. Hoy, en su bodega se organizan conciertos de verano en un sitio íntimo bajo las estrellas, un derroche que vale la pena.
Saratoga también tiene una tradición de spas, gracias a sus manantiales naturales y a los espléndidos refugios, construidos a su alrededor, a fines de 1800. Hoy el moderno paraíso terrestre incluye Nilou y Preston Wynne.
