Para la mayoría de las personas, la vida en el desierto parece dura y desolada, pero, para el ranchero y minero William F. Keys, fue su hogar durante casi 60 años. Bill Keys fue contratado para administrar la mina Desert Queen Ranch a principios de 1900, pero cuando cerró en 1917, decidió quedarse en Joshua Tree hasta su muerte en 1969. Allí, ocupaba un pedazo de tierra que él mismo llamo el Desert Queen Ranch. Keys tuvo al menos 30 concesiones mineras, donde excavó en busca de oro y alabastro. También operó una trituradora con la que molía minerales para otros mineros de la zona. En este cañón rocoso y remoto, él y su esposa Frances criaron cinco hijos y construyeron un rancho, una escuela, un taller y una tienda. Criaban cabras, gallinas y ganado, y cultivaban un huerto frutal y un jardín de verduras. Cavaron pozos profundos para abastecerse de agua, construyeron molinos de viento e hicieron una represa en los cañones rocosos que rodeaban el rancho para crear un lago. Eran, en una palabra, pioneros.
Las visitas a pie guiadas de 90 minutos (con recesos en el verano) visitan los edificios aún en pie, el equipo de minería que utilizaban y otras reliquias de la sorprendente vida de los Keys en este desierto.