Durante el invierno, la Madre Naturaleza es buena con Mammoth Lakes. Muy muy buena. En el pico característico del pueblo, Mammoth Mountain, caen en promedio más de 9 metros de nieve y los elevadores y las góndolas continúan acercándose por más tiempo que en cualquier centro turístico del estado. La vuelta de tuerca es que, aun siendo invierno, deberá cubrirse de protector solar. Mammoth se enorgullece de contar con cerca de 300 días de sol al año, de modo que las sillas para después de esquiar ubicadas en el solarium de este complejo en medio de la montaña de Mammoth tienen mucho movimiento. También hay mucha actividad en la ciudad al pie de la montaña, con tiendas, restaurante y vida nocturna. Cambie de aire pasando un día en las pendientes de June Mountain, un lugar cercano y que está entre los favoritos por su tranquilidad y la amabilidad de su gente. Aun si no esquía, puede aprovechar la telecabina de Mammoth Mountain, que sube hasta la cima de la montaña a 3369 metros y le permite contemplar maravillosas e increíbles vistas de los picos elevados que la rodean.
Si desea un paseo más tranquilo y típico de invierno, diríjase a Tamarack Cross Country Ski Center, donde encontrará vistas de senderos especiales para el esquí nórdico y la caminata por la nieve que lo dejarán sin aliento. Aunque no se aloje en el hotel Tamarack Lodge cercano, puede pasar un agradable momento en el gran salón con una taza de vino caliente junto a la chimenea y, luego, quedarse a cenar (puede hacerlo con ropa de esquí) en Lakefront Restaurant, un restaurante de lo más acogedor.
Los placeres de invierno son los mejores: elige entre excursiones motorizadas Snowcat o caminatas guiadas por la nieve, a la luz de la luna. Asciende por lo tubos con los niños. Deslízate a través del bosque en un trineo de perros. Después de tanto esquí, vaya a hacerse masajes en los complejos del área, tales como Sierra Nevada Resort y Spa o Snowcreek Athletic Club. O tan solo disfrute del mayor placer —el tiempo libre— y observe cómo el rosicler brinda un tono rojizo a las montañas durante el atardecer.